El pasado 30 de junio el prisionero de conciencia del Grupo de los 75 fue inesperadamente visitado por el alto oficial de la Seguridad del Estado, Fernando Tamayo, del Departamento 21, quien le habló de los traslados de presos tras las conversaciones de la Iglesia Católica con el régimen del general Raúl Castro.
Cuenta Ferrer García, condenado a 25 años de cárcel durante la Primavera Negra de 2003 y miembro del Movimiento Cristiano Liberación, que poco después se personaron en su celda, por primera vez desde que esta en presidio, un grupo de psicólogos para preguntarle a qué se dedicaría en el caso hipotético de ser liberado.
Asegura el prisionero político que su respuesta fue que se dedicaría a la misma actividad que lo había llevado a la cárcel y a la cual se dedica aún desde su celda: a la defensa de los derechos humanos y a la lucha pacífica por el establecimiento de la democracia en la isla.
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